Artículo escrito por Lorena Imaz, Coordinadora de Diseño y Marketing Digital en Universidad Cristiana Logos
Organizar nuestro tiempo es todo un tema cierto? Me gustaría compartir consejos útiles de gestión del tiempo para madres, esposas, estudiantes que vuelven a intentar cumplir cada rol, dando lo mejor, gestionando los tiempos sin desistir de la educación.
Te presento 10 consejos, simples pero efectivos para implementar:
1. Empieza tu jornada con un devocional, entregándole tu día al Señor.
Chequea tus tareas diarias. Todas somos tentadas a hacer, hacer y hacer. Pero créeme, si tomas 10 minutos para sentarte y realizar un listado de tus pendientes y las que tienes para hoy, tendrás un panorama más completo de todo tu día. ¿Qué tienes para hoy?
2. Realiza una lista de todas tus tareas y actividades semanales.
Piensa en una semana normal en tu rutina. ¿Qué debes concluir esta semana?
3. Haz un timming de tus actividades diarias y de la semana.
Piensa en cuanto tiempo te toma realizar cada tarea. ¿Cuánto tiempo le dedicas a cada una de ellas? Ten en cuenta que no todo es tan lineal, ni ideal, pero sé realista. Esto te ayudará a conocer mejor tus tiempos.
4. Aprende a optimizar
Una vez que tengas tus tareas medianamente definidas, pregúntate; ¿hay alguna de ellas que pueda unificar? ¿Hay alguna tarea que se pueda delegar?
Por ejemplo, puedes apartar un tiempo para realizar las compras para una semana o inclusive del mes, sin tener que cada día salir a comprar los alimentos para la cena.
5. Planifica tus comidas semanales.
Puedes optar por cocinar una vez para varios días, colocar en el freezer debidamente acondicionado, e ir utilizando a medida que lo necesites. Te seguro que tendrás más del 50% de tu almuerzo o cena adelantadas.
6. Estudia en tus ratos disponibles.
La mejor opción para no salir de casa y ahorrar tiempo en traslados, es estudiar online, solo necesitas una computadora y conexión a internet. Mientras estudies, grábate leyendo. Cuando dispongas unos minutos, mientras estás en periodos de esperas, de esos tiempos inevitables, podrás escuchar los audios de manera de reafirmar lo que hayas estudiado.
7. Pide ayuda, pide colaboración.
Eres de carne y hueso, no lo olvides. No te pongas más exigencias ni quieras resolverlo todo. Recuerda, tu eres quien depende de Dios. Más allá de organizar tu día, encomiéndaselo siempre a Él.
8. Haz un tiempo en tu semana para realizar un hobbie, hacer ejercicio o realizar una actividad en que te sientas a gusto.
Canta, ríe, disfruta. No todo son exigencias. Recuerda, eres mamá y tus niños siempre miran tus reacciones, por más simple que parezcan.
9. Identifica las pequeñas zorras.
¿Cuáles son aquellos “roba tiempos” que has estado enfrentando en tu vida cotidiana? Recuerda, no eres más productiva por hacer más, sino quien organizarte y optimar mejor el tiempo.
10. Depende de Dios siempre.
No hay una planificación 100% efectiva para todas, sino el depender de su guía y dirección diaria. Ese es el plan que nunca fallará.
Espero que estos consejos ayuden a muchas madres con la gestión de su tiempo en su día a día, así como me han servido de ayuda. Me agradaría, que pudieras dejar en los comentarios, cuál de ellos te ha resultado o agregarías a la lista.
Quisiera terminar, dándole las gracias a Dios por todas aquellas madres, esposas, estudiantes y mujeres virtuosas, que toman tiempo para invertir en la educación. No solo para ellas, sino también a favor de otros, con la mirada al futuro y a las siguientes generaciones.
Gracias Padre, porque tú eres quien las capacitas, dándoles la sabiduría para enfrentar cada día, cada desafío, cada compromiso, cada tarea, a lo largo de sus días.
Gracias Señor, por cada madre, que ha dicho si a dar un paso extra al prepararse. Fortalece su vida, su cuerpo, su mente, su espíritu, para continuar hasta el final de su meta de aprendizaje.
Señor, dales tú, la orientación de cuál es el mejor plan de organización para ellas aprender, para que se conviertan también, en madres ejemplares, que te ponen en primer lugar a ti, por encima de todo.
Gracias por cada una de ellas, donde sea que se encuentren. Oramos y las bendecimos en el nombre de Jesús. ¡Amén!