By ¡Les damos la más cordial bienvenida a nuestro espacio de consejería y reflexión! En esta temporada navideña, las festividades no siempre traen consigo alegría sin preocupaciones. En esta sesión, exploraremos la manera en que compartir las cargas con nuestros seres queridos no solo alivia el estrés, sino que también fortalece nuestras relaciones. Juntos, construyamos un apoyo significativo en medio de las tensiones propias de la temporada festiva.
Cargados de Expectativas: Abordando el Estrés Navideño
Las festividades a menudo nos sumergen en un mar de expectativas, desde regalos perfectos hasta cenas sin contratiempos. Mateo 11:28 nos invita a acudir a Jesús cuando estamos cargados: «Vengan a mí todos ustedes que están cansados y agobiados, y yo les daré descanso.» (NVI 1999). Reconocer la presión que llevamos, nos permite buscar alivio juntos.
Ayudándonos Mutuamente: La Ley de Cristo en la Práctica
Gálatas 6:2 nos presenta un mandato poderoso: «Ayúdense mutuamente a llevar sus cargas, y así cumplirán la ley de Cristo.» (NVI,1999). Reflexionemos sobre cómo podemos aplicar esta ley en la práctica, brindando apoyo tangible y emocional a quienes nos rodean, y permitiéndonos ser apoyados a su vez.
Compartiendo Estrés, Multiplicando Alegría
Filipenses 4:6-7 nos recuerda la importancia de la oración y la comunión en tiempos de ansiedad: «No se inquieten por nada; más bien, en toda ocasión, con oración y ruego, presenten sus peticiones a Dios y denle gracias. Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, cuidará sus corazones y sus pensamientos en Cristo Jesús.» (NVI 1999) Compartir nuestras preocupaciones con otros no solo alivia la carga, sino que también abre espacio para la paz divina.
Juntos Frente a Desafíos
Eclesiastés 4:9-10 resalta la fortaleza que proviene de la unidad: «Mejores son dos que uno, porque tienen buena paga de su labor. Porque si caen, el uno levantará a su compañero; pero ¡ay del solo! que cuando caiga, no habrá segundo que lo levante.» (Reina Valera, 1960) Enfrentemos juntos los desafíos que trae consigo la temporada, sabiendo que la colaboración multiplica nuestra capacidad para superarlos.
Construyendo Conexiones Verdaderas:
La amistad y el apoyo en tiempos difíciles fortalecen nuestras conexiones. Proverbios 17:17 destaca la importancia de la amistad genuina: «En todo tiempo ama el amigo, y es como un hermano en tiempo de angustia.» (Reina Valera 1960). Permitamos que el estrés nos acerque, construyendo relaciones más profundas y significativas.
Martha y el Arte de Priorizar
En nuestras vidas, a menudo emulamos a Martha, quien, según Lucas 10:38-42, se encontraba ansiosa y preocupada por muchos quehaceres mientras Jesús estaba en su hogar. En medio de las festividades, podemos aprender de su experiencia al reconocer que, si bien las tareas son importantes, la presencia y el compartir con quienes amamos son aún más valiosos. Sigamos el ejemplo de María, quien eligió sentarse a los pies de Jesús, mostrando que algunas cosas son más importantes que las ocupaciones diarias.
Conclusión: Juntos en la Alegría y en el Estrés Navideño
Que esta temporada festiva no solo nos encuentre compartiendo risas, sino también compartiendo cargas. Que la ayuda mutua, inspirada en la ley de Cristo, nos guíe a través de los desafíos, construyendo conexiones verdaderas y brindándonos alegría incluso en medio del estrés.
Al ofrecer y recibir apoyo, descubrimos que no estamos solos en nuestras luchas y que la verdadera alegría navideña se encuentra en el compañerismo y el amor compartido. ¡Que esta Navidad nos encuentre más cerca que nunca, llevando nuestras cargas juntos y multiplicando la alegría que encontramos en Cristo!
Por María del Pilar Salazar
Decana Académica
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